Nadie debe asustarse de lo que piensa, aunque su pensar aparezca en pugna con las leyes más elementales de la lógica. Porque todo ha de ser pensado por alguien, y el mayor desatino puede ser un punto de vista de lo real.
Antonio Machado
Qué es
La metacognición es la capacidad que tiene el cerebro para pensar en cómo piensa.
Podemos decir, por establecer un paralelismo, que la metacognición es al cerebro y la capacidad de pensar, lo que la metalingüística es a la capacidad de hablar de la propia lengua.
Por qué es importante
En situaciones idénticas o muy similares las personas tendemos a repetir las mismas pautas de conducta. Nuestro pensamiento ha llegado a una serie de conclusiones que funcionan. Pero si uno de los hilos argumentales de la situación, uno de sus factores cambia, esas pautas podrían ya no ser válidas.
Por ello nuestro cerebro tiene que reconducir su modo de pensar para poder adaptarse a las nuevos escenarios y emitir razonamientos diferentes para actuar de modo, también diferente; es decir, nuestro cerebro debe percatarse de que pensar como pensaba ya no es válido, por lo que debe cambiar su modo de pensar.
Sin la metacognición, sin esa consciencia de su mismo pensamiento, el ser humano no podría replantearse sus pensamientos y las conclusiones a las que ha llegado, y por lo tanto, analizar las cosas desde otro punto de vista.
Cómo son las personas que dominan la metacognición
Son personas muy válidas para trabajar de forma autónoma o en equipos, que trabajan bajo presión y que deben enfrentarse a imprevistos que requieren soluciones rápidas. Además:
- Aceptan posiciones de liderazgo y responsabilidad
- No temen la toma de decisiones y aceptan las consecuencias derivadas de ellas
- Tienen una alta autoestima y transmiten seguridad a las personas que trabajan con ellas
- Son perspicaces y empáticas: saben interpretar los cambios en su entorno y adaptarse a ellos
- Son flexibles, saben escuchar y pueden cambiar e opinión si el argumento los convence
- Reaccionan con rapidez a los imprevistos
- Analizan situaciones y proponen vías de solución ante los posibles conflictos
Como desarrollar y mejorar la metacognición
La metacognición puede reforzarse y desarrollarse con práctica. La constancia es importante.
- Pensar, reflexionar sobre diferentes casos cotidianos: un problema que nos haya comentado un amigo, un familiar. Intentar dar argumentos sobre:
- cómo lo resolvería yo
- cómo lo resolvería si fuera él
- cómo lo afrontaría si no nos uniera ningún nexo emocional
- Escoge una noticia de un diario que plantee un dilema/problema (político, social, ambiental, urbanístico…) e intentemos proponer diferentes soluciones utilizando diferentes puntos de vista:
- racional
- emocional
- ético
- económico
- moral
- absurdo
- cualquier otro que se te ocurra
Para desarrollar las habilidades directivas: plantearse un proyecto u objetivo real relacionado con el ámbito laboral, buscar todas las posibilidades y alternativas, analizar los recursos económicos, materiales y humanos que implicaría su realización, hacer una tabla con las consecuencias de llevar a cabo el proyecto de diferentes modos.